Realidad a golpe de fotograma


Llego aproximadamente un año tarde pero no importa, la dicha es de las buenas.

Hoy tengo el placer de presentaros una obra maestra de la cámara lenta realizada por Vicente Sahuc y Sara Fernández y que gira en torno a la ciudad de Nueva York.

Solamente con unos pocos planos épicos, elegantes y brutalmente descriptivos el montaje resume la vida cotidiana de la ciudad; esa Gran Manzana cuyas aceras son capaces de acoger a viandantes de bajo rasero como a la very important people de Wall Street.

El clip fue grabado con una Casio Ex-F1 a 300 fotogramas por segundo (luego convertidos a 24, más amistosos para el ojo humano) además de un steadicam Merlin y un monopatín para los travellings.

Cada vez que lo vuelvo a visionar pienso que una tras otra todas las tomas cuadran a la perfección con la música, la excelente Numb de los irlandeses U2 (narrada por el guitarrista The Edge y con el falsete zooropeño de Bono como acompañamiento).

En fin, mejor que lo veáis vosotros mismos, que yo me emociono 😉

Los vídeos de Vodpod ya no están disponibles.

Esta es la gran masterpiece de Vicente + Sara, la que hace aproximadamente año y medio mostró al mundillo audiovisual que no hacen falta alardes tecnológicos ni inversiones desorbitadas para hacer obras de arte.

Únicamente se requieren experiencia, virtud… Y paciencia.

Como postre os quiero dejar otro trabajo más reciente de este dúo, esta vez patrocinado por la desconocida multinacional del textil ZARA.

Amancio Ortega y compañía no son tontos. Con motivo de la reciente apertura de un ZARA en el barrio de Shibuya (Tokio), la compañía española quiso contar con una suerte de spot que congeniara el espíritu cool hunter de la empresa con el estilo de vida de las típicas Harajuku girls.

…Y vais a ver cómo congenia, además de ser atractivo y espectacular:

Los vídeos de Vodpod ya no están disponibles.

La escena del espejo (min. 1:37) me parece sencillamente magistral e inteligente… La del paso de cebra (min. 1:42) también lo es pero en comparación con la otra se queda pequeña 😀

¡Ah!, la música corre a cargo de Manuel Riveiro y por cierto, no sé si son cosas mías o qué, pero la música se me antoja un cruce celta-japonés… ¿Alguna opinión que lo corrobore?.

Enlaces para curiosear: